sábado, 20 de noviembre de 2010

Poesía Involuntaria.

"Paul Eduard decide presentar en 1942 una página en verso de lo que para él representa la poesía involuntaria. El texto de Margarite o la Aimée de Lacan cuyo autor es Jean Allouch; decide reproducir algo de los escritos de Margarite. A continuación la Poesía Involuntaria:

¡Oh! ¡Soy celosa si mi marido es un roble y yo un cerezo blanco!
¡Soy muy celosa si él es un roble y yo un sauce cambiante!
En el bosque moviente, la lluvia les envía mismo besos.
Me encorvo para tomar una espada, encontré una en el camino
hay que conquistar el derecho de amar.

... En las cañadas, por el invierno escarchado, las bocas pequeñas
escolares tiemblan, con un ruido fabuloso, dulce.
Las escucho sobre diez centímetros de nieve florida, sus cuerpos,
sus brazos dejan un molde en cruz, los dedos redondos y sus
cabellos de líneas armónicas en todos sentidos, se ponen de pie
sin usar los codos, estirando la nuez de la rodilla recalentadas,
felices, ya no sienten el frío del día ¡Ah! No hay nada mejor que
florecer en la nieve de invierno.
... Conozco todas las piedras de mi país, las azules, las blancas,
los marrones; son mis amigas, les hablo. ¿Qué haces tú ahí?
... Quisiera que dijeran que soy bonita como una piedra en el agua.
¡Oh, piedras amigas mías, no olviden sus oraciones!
[Los poetas] me matan en efigie y los bandidos matan:
cortan en pedazos. Traman secretos y los pueblos traman secretos.
Los que leen los libros no son tan tontos como los que los hacen,
algo les agregan. Citado por Lacan."

Todo esto lo podrán consultar en el libro anteriormente citado en la pág. 610. Una vez más la invitación a que lo leean por su gran investigación sobre el caso Aimée de Lacan.
Imagen de: libreriapaidos.com