Sin duda el caso del Parricida Pierre Rivière nos deja un mal sabor de boca al enterarnos de las distintas interpretaciones con respecto a dicho caso clínico. Existen diversas opiniones entre los jueces de la época y los médicos en lo tocante al asesinato múltiple cuyo autor es víctima de un entorno familiar por demás complicado. La culpa (creo yo) tiene que ver con que su madre es una persona con rasgos perversos y un padre sin función. No sabemos si el pasaje al acto lacaniano lo podrá describir de una mejor manera o una posición esquizo-paranoide Kleiniana lo arribará en una perspectiva más compleja. Lo que nos queda claro es que el caso apuntaría a una ruptura social cuyos rasgos patológicos son parte de una disfuncionalidad biopsicosocial. Los siguientes dos párrafos de la canción es tomada del libro "Yo, Pierre Rivière..." que días anteriores he recomendado y que por lo tanto nos revela el caso de un modo más ameno y resume en sí lo sucedido. Sin duda una invitación más a que lo lean.
Romance de lo Sucedido.
Si en los faustos de memoria
se inscriben guerreros famosos
de algunos bandidos de la historia
conservamos sus nombres espantosos;
el del joven Pierre Rivière,
del que os voy a contar las gestas,
para el horror de la tierra entera
figurará para siempre jamás.
A sus 20 años apenas
a su madre cortó los días
y a su infeliz hermana
detuvo el cursos de la vida.
Su pobre madre estaba encinta
cuando él cometió el asesinato,
al oír este romance
os quedaréis horrorizados.
Bibliografía:
Yo, Pierre Rivière, habiendo...
Michel Foucault
Ed. TusQuets Editores
Pág. 212.
Imagen de: foucault.info
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